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Militares no pueden dejar morir el gran sueño de los caleños
Hace cuatro meses, cuando empezaba la administración Guerrero y todos eran plácemes, se nombró a Esteban Piedrahita como otro perfil Vallecaucano de mostrar, ahora de regreso al terruño.
Después de su periplo por Wall-Street y su auspicioso paso por Planeación Nacional, aterrizó en la ciudad con la más increíble y soñadora idea para Cali: recuperar para los caleños, de una vez y definidamente, ese enorme manchón verde que es la base aérea.
El flamante director de Planeación, haciendo gala de un inusitado humanismo, re-editó una vieja idea que siempre pareció vedada en la ciudad: reubicar a los escasos militares que ocupan ese ‘Central-Park’ caleño, y abrirlo para el disfrute de al menos un medio millón de caleños, mejorando así la calidad de vida, no sólo de los habitantes de esa deprimida zona del centro-oriente de Cali, sino de toda la ciudad.
Esta es una aspiración de muchos caleños hace décadas, afirmó Piedrahita: “pero depende de las Fuerzas Militares de Colombia y sus prioridades. La prioridad número uno del Estado Nacional es garantizar la seguridad, ya que el Sur- Occidente de Colombia tiene desafíos grandes en seguridad, lo que el Ministerio de Defensa y los altos mandos de las Fuerzas Militares han planteado, es que necesitamos una verdadera pista que permita operaciones de verdad” explicó el joven funcionario.
Tras la noticia, la gente del sector se declaró feliz y a la expectativa que ahora sí fuese realidad tanta dicha. Vecinos de deprimidos barrios como San Marino, Patio Quinto o las Ceibas serían los primeros beneficiados pues durante años sólo han visto militares custodiando las rejas del paraíso verde que está al otro lado.
La pista de la Base Aérea es muy limitada —acepta Piedrahita— la idea es que si logramos que el Gobierno Nacional y la Embajada Americana contribuyan para que se haga una segunda pista y una base que le de todas las garantías operacionales a nuestra Fuerza Aérea garantizar la seguridad del país. No quisiéramos que la universidad aérea se vaya de Cali, lo que quisiéramos proponer es solamente si está de acuerdo el mando militar y se logra una base aérea de óptima calidad en Palmaseca, que además dinamizaría el aeropuerto civil”.
De nuevo, en manos del mando militar está tomar esta decisión que tocaría, para bien, la vida de millones de personas que se levantan y viven con ese peligro latente, no sólo de ataques, sino de accidentes, por estar en una zona de continua operación aérea. Ya hace unos años una de las destartaladas avionetas de la escuela de aviación cayó en pleno centro de la Ciudad; también se dieron varios casos en que los enormes aviones Hércules tumbaron tejados en el afligido barrio Cali Bella y Alfonso López, que tienen la onerosa obligación de darle la cara al final de la pista.
Y es que la base aérea está en medio de la ciudad, rodeada de cientos de miles de personas que viven y duermen frente a esta bomba de tiempo. Pero trasladarla siempre ha tenido como piedra en el zapato la primacía de lo militar sobre la calidad de vida de los ciudadanos.
Es difícil —reconoce Esteban Piedrahita— porque hay mucha gente que debe ponerse de acuerdo, pero creo que las demandas de seguridad están alineadas; hay que hacer un trabajo conjunto hay que tener un compromiso de la Alcaldía de Palmira, Alcaldía Cali, Gobernación pero sobre todo de las Fuerzas Militares, dijo.
La Embajada Americana ve el proyecto con muy buenos ojos: “los desafíos de seguridad en Colombia muchos están ubicados en el Sur-Occidente y las misiones se vuelan desde la Base de Palanquero; si tuviéramos una base óptima acá [en el Valle], nuestra base podría generar resultados importantes, eso desencadenaría un proceso de urbanismo de generación en espacio público”.
Finalmente el funcionario declara que su idea es crear proyectos de alto impacto para la ciudad: “en Cali tenemos dificultades instituciones, funcionales, pero estamos dispuestos a solucionarlas, hay recursos del Gobierno Nacional y privados. Estamos estructurando cosas muy interesantes, por ejemplo retomando la idea del anterior alcalde de darle un nuevo rumbo al Centro de Cali para recuperar el aspecto de la ciudad y generar la dinámica de inversión en vivienda y comercial alrededor de la Fiscalía; el MIO es una prioridad ahora y estamos pensando en un gran corredor verde y una ciclo- ruta, en el corredor férreo hacer un gran parque lineal con movilidad verde; tenemos proyectos para hacer grandes parques en la ciudad y ampliar los espacios públicos; proyectos en Educación. Me interesa contribuir en proyectos a largo plazo que requieran una buena estructuración, que no son de gran impacto para la ciudad”.